BUFFALO SPRINGFIELD (For what it's worth)
Buffalo Springfield se constituyó en Los Ángeles a mediados de los sesenta, y en poco más de dos años dejaron tres excelentes álbumes de folk-rock, a la altura de la importancia de los músicos integrantes del grupo, Neil Young y Stephen Stills entre ellos.
En Buffalo Springfield también estaban Bruce Palmer (bajo), el batería Dewey Martin y el guitarra rítmica Richie Furay. En 1967, tras la marcha temporal de Neil Young, se les unió Jim Messina. Este y Furay formarían en 1969 el grupo de country-rock Poco.
Buffalo Springfield definieron una línea complementaria a la de los The Byrds, menos psicodelizada y más campestre y coral. Debutaron en el Troubadour, en abril de 1966, y poco después el Whisky a Go Go los vería en actuaciones electrizantes.
En la grabación de Buffalo Springfield (1966) se reflejó el sello especial de Stills y Young. Tras presenciar disturbios callejeros en Sunset Strip, el primero había escrito la canción 'For what is worth’, que se alzó con valor emblemático del rock de los sesenta.
(Algo está pasando aquí / Pero no se sabe exactamente qué / Ahí hay un hombre con una pistola / Diciéndome que me ande con cuidado / Me parece que es tiempo de parar / Hermanos, ¿qué es ese sonido? / Que todos miren lo que pasa / Las líneas de batalla están trazadas / Nadie tiene razón si todo el mundo está equivocado / La gente joven expresa lo que siente / Enfrentándose a la resistencia que viene de atrás / Es hora de parar / ¿Qué sonido es ese?… / Miles de personas en las calles)
miércoles, 22 de mayo de 2024
For what it's worth
jueves, 16 de mayo de 2024
Feeling good
NINA SIMONE (Feeling good)
Ambientada en Tokio, la reciente película de Wim Wenders Perfect Days enseña que la vida puede ser entendida desde una mirada apreciativa de lo simple y cercana a la experiencia concreta, equivaliendo al amanecer de una nueva conciencia.
Al final de la película, la banda sonora refuerza esa idea haciendo sonar ‘Feeling good’ en voz de Nina Simone, una canción de su álbum I Put A Spell On You (1965), título que reconocía a un autor, "Screaming Jay” Hawkins, de fuerza liberadora en el rock.
Ella pasaba entonces de la treintena y pronto sería reconocida como ‘la alta sacerdotisa del soul’, pero sabía que ser mujer y negra en Estados Unidos conllevaba una doble discriminación que cabía combatir con leyes y el despertar a la propia dignidad.
Nina se sumó al Movimiento por los Derechos Civiles y a las fuerzas emancipadoras que promovía el arte. Encontró así ‘Feeling good’ en un musical inglés estrenado en 1964, interpretando la canción como si fuera una extensión de su propia personalidad.
(Pájaros que vuelan alto, imagina cómo me siento / El sol en el cielo... / Brisa que va desplazándose, imagina cómo me siento... / Es un nuevo amanecer / Es un nuevo día / Una vida nueva para mí / Me siento bien / El pez en el agua, imagina cómo me siento / El río fluyendo en libertad... / Floración en el árbol, imagina cómo me siento / Libélulas moviéndose al sol, ya sabes lo que quiero decir, ¿verdad?... / Dormir tranquilo al terminar el día, a eso me refiero / Y este viejo mundo es un nuevo mundo)
sábado, 4 de mayo de 2024
Time after Time
CYNDI LAUPER (Time after time)
No hay mejor imagen para caracterizar a la Cyndi Lauper de 1983 que la que ilustra la portada de su álbum She’s so unusual, el arrollador debut de pop bailable que parecía haberse intoxicado de noches de fiesta y del poder concedido al dinero.
A Cyndi se la veía dibujando un desinhibido escorzo de libertad y movimiento, proyectando la idea de que las chicas no ponían límites a pasárselo bien. Había obtenido aquella imagen icónica Annie Leibovitz, la fotógrafa que había convertido el retrato en arte.
El disco, producido por David Wolff, su mánager y novio entonces, puso dos canciones (‘Girls just want to have fun’ y ’Time after time’) entre los número uno de las listas, fue platino en ventas y tuvo omnipresencia en la MTV, la cadena de vídeos musicales.
Las diez canciones del álbum llevaban la gracia de su voz singularmente aniñada, como si Cyndi (tenía treinta años) temiera la edad adulta y con ella perder la profusión de colores que, admirando la belleza del arco iris, adornaban su falda, su pelo y su música.
(Echada en la cama / Oigo el tictac del reloj y pienso en ti / Atrapada en círculos / La confusión no es nada nuevo / Me acuerdo de noches ardorosas ya casi sin continuación / Una maleta de recuerdos / Una y otra vez / A veces te hiciste una idea de mí / Como si caminara muy por delante / Me estás llamando / No puedo oír lo que dices / Luego vas y dices: ‘Ve despacio, estoy caído detrás / El tiempo va pasando / Si estás perdido, puedes mirar / Y me encontrarás una y otra vez / Si caes, yo te agarraré / Estaré esperando una y otra vez)