La impactante biografía musical de Bobby Womack se extiende a más de medio siglo, remontándose a los años cincuenta cuando, en compañía de sus cuatro hermanos, formaba parte del grupo de gospel The Womack Brothers.
Esos tempranos inicios cambiaron de signo en los sesenta con The Valentinos, el nuevo proyecto de orientación rythm & blues que apadrinó Sam Cooke, y del que saldría "It's all over now", que fue un triunfo para los Rolling Stones.
Desde entonces su nombre fue agigantándose, y Wilson Pickett ("I'm in love"), Frank Sinatra ("Fly me to the moon"), Janis Joplin ("Trust me") o Mamas & Papas ("California dreaming") convertirían sus canciones en tremendos éxitos.
La propia discografía de Bobby Womack cosecha no menos de doce grandes álbumes, entre ellos el reciente "The bravest man in the universe" (2012), en donde "Nothin' can save ya" se abre a una hipnótica ambientación futurista en clave funk.
("Estaba como soñando/Y mi corazón hacía planes/Intentando resistir/Pero todo se me estaba escapando de entre las manos/¿Me escuchabas?/¿Estuve cerca de tu corazón?/Me esforcé por llegar hasta ti/Pero tuve que renunciar/Me parece que nada puede salvarte")
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